Y esa lágrima parece decir; ¡oh Madre mía! Decid qué deseáis; todo lo mío es también vuestro ¿Esta concedido; Jesús ha sido ganado! ¡Ha sido tocado en su punto flaco! Ahora pide; lo obtendrás todo, absolutamente todo lo que sea conforme a la gloria de Dios y no perjudique a tu salvación. ¿No es consoladora y confortante esa certeza de ser oído y esa seguridad de poder decir; yo puedo alcanzarlo todo de mi Divino Salvador y Él no me puede negar nada? Pruébalo, y experimentarás que no es ficción piadosa sino dulce realidad. En las penas, en las tentaciones, ve a Jesús con esta simple expresión: "Jesús, aquí tenéis a vuestra Madre!

jueves, 6 de febrero de 2014

VISITAS REPARADORAS A LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA (Visita primera)

Intención de la visita;

Por las blasfemias contra el Inmaculado Corazón

Intención de la oración;

Amarla y servirla siempre

¡Os venero, oh gran Reina, y humildemente os agradezco todas las gracias y mercedes que hasta ahora me habéis hecho!

Inmaculada Virgen y Madre mía, María Santísima; a Vos que sois Madre de mi Salvador, Reina del mundo, Abogada, Esperanza y refugio de los pecadores; recurro en este día, yo que soy el más miserable de todos. Os venero, oh gran Reina, y humildemente os agradezco todas las gracias y mercedes que hasta ahora me habéis hecho, especialmente la de haberme librado del infierno, tantas veces merecido por mis pecados. Os amo, Señora amabilísima, y por el amor que os tengo, propongo serviros siempre, y hacer lo posible para que de todos seáis servida. En Vos, ¡oh Madre de Misericordia!, después de mi Señor Jesucristo, pongo toda mi esperanza; admitidme por siervo vuestro, defendedme con vuestra protección; y ya que sois tan poderosa para con Dios, libradme de todas las tentaciones y alcanzadme gracia para vencerlas hasta la muerte. Os pido un verdadero amor para con mi Señor Jesucristo, y por Vos espero alcanzar una buena muerte. ¡Oh Señora y Madre mía!, por el grande amor que tenéis a Dios, os ruego que siempre me ayudéis, pero mucho más en el último momento de mi vida: no me desamparéis hasta verme salvo en el cielo, alabándoos y cantando vuestra misericordia por toda la eternidad...

AMÉN


Verán que la intención de la visita no coincide con la oración a recitar. En las visitas tendremos la intención en nuestro corazón, y nuestra mente, de reparar a nuestra Santa Madre por la intención del día y por otro lado, la petición que haremos a Ella por medio de la oración que se reza.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.