Y esa lágrima parece decir; ¡oh Madre mía! Decid qué deseáis; todo lo mío es también vuestro ¿Esta concedido; Jesús ha sido ganado! ¡Ha sido tocado en su punto flaco! Ahora pide; lo obtendrás todo, absolutamente todo lo que sea conforme a la gloria de Dios y no perjudique a tu salvación. ¿No es consoladora y confortante esa certeza de ser oído y esa seguridad de poder decir; yo puedo alcanzarlo todo de mi Divino Salvador y Él no me puede negar nada? Pruébalo, y experimentarás que no es ficción piadosa sino dulce realidad. En las penas, en las tentaciones, ve a Jesús con esta simple expresión: "Jesús, aquí tenéis a vuestra Madre!

jueves, 1 de noviembre de 2018

VIRGEN DE LA CONFIANZA, CONFIANZA EN MARÍA

Imagen de la Virgen de la Confianza,
venerada en la Capilla del Pontificio Seminario Romano

“La Divina Señora se dignó concederme que toda alma que con confianza se presente delante de este cuadro, experimentará una verdadera contrición de sus pecados, con verdadero dolor y arrepentimiento, y obtendrá de su Divinísimo Hijo el perdón general de todos sus pecados. Además esa mi Divina Señora, con amor de verdadera Madre, condescendió en asegurarme que a toda alma que contemple esta imagen, concederá una particular ternura y devoción hacia Ella”

Hna. Clara Isabel Fornari, Clarisa fallecida
en 1744 y con Proceso de Beatificación en curso





La devoción a la “Madonna della Fiducia” se muestra particularmente benéfica cuando se reza la jaculatoria “¡Madre mía, confianza mía!"

Muchos son aquellos que se fortalecen en la confianza, o la recuperan, apenas por contemplar esa bella pintura, sintiéndose inundados por la mirada materna, serena, cariñosa y alentadora de la Reina del Cielo.

Y el Divino Niño, también observando al fiel, apunta su índice a la Santísima Virgen, como diciendo: “Colócate bajo su protección, recurre a Ella, se enteramente de Ella y conseguirás llegar a Mí”



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.